Las acciones terminaron otra semana agitada con más pérdidas el viernes, ya que los inversores consideraron el lado negativo del todavía sólido mercado laboral estadounidense.

El S&P 500 cayó un 1,6%, marcando su octava semana de pérdidas en las últimas nueve. Las pérdidas de las grandes empresas tecnológicas contribuyeron a que el Nasdaq bajara un 2,5 por ciento.

El índice Dow Jones perdió un 1%. Un informe que muestra una contratación más fuerte de lo esperado el mes pasado es una buena noticia para la economía en medio de las preocupaciones sobre una posible recesión.

Los rendimientos de los bonos del Tesoro subieron después de que el gobierno informara contrataciones más fuertes de lo esperado el mes pasado, lo que mantuvo a la Reserva Federal encaminada para una serie de aumentos importantes en las tasas de interés destinados a controlar la inflación y desacelerar la economía.

Las acciones subieron el viernes en Wall Street y cerraron la semana al alza, rompiendo una racha de siete semanas de pérdidas, la más larga desde 2001.

El S&P 500 subió un 2,5%, aumentando su ganancia semanal al 6,6%. Es la mayor ganancia semanal del índice de referencia desde noviembre de 2020.

Las acciones tecnológicas fueron un factor importante que impulsó el mercado al alza. Eso hizo que el Nasdaq compuesto subiera un 3,3 por ciento. El Dow Jones Industrial Average subió un 1,8 por ciento.

El S&P y el Nasdaq sufrieron siete descensos semanales consecutivos, la serie más larga desde el final de la crisis de las puntocom, mientras que la caída de ocho semanas del Dow fue la más larga desde 1932.

Los minoristas también obtuvieron sólidas ganancias. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años, que ayuda a fijar los tipos de interés de las hipotecas, bajó al 2,74%. Los precios del crudo estadounidense subieron.

Un informe del Departamento de Comercio mostró que el gasto de los consumidores aumentó un 0,9% en abril -por encima de lo esperado- y que la inflación se desaceleró, lo que podría hacer que la Reserva Federal no suba las tasas de interés de forma tan agresiva como se pensaba.

“Si el consumidor es capaz de seguir gastando y la cifra anterior fue revisada al alza, es una buena noticia”, dijo Robert Pavlik, de Dakota Wealth en Fairfield, Connecticut. “Ahora mismo es solo un repunte en un mercado bajista (…) el mercado se ha sobrevendido mucho y la gente busca gangas”.

“Era inevitable que la racha de pérdidas terminara”, dijo Tim Ghriskey, estratega senior de carteras de Ingalls & Snyder. “Las correcciones y los mercados bajistas van seguidos de mercados ‘alcistas’”.

Las orientaciones generalmente optimistas sobre las ganancias empresariales y los sólidos indicadores económicos han alentado las expectativas de que la Fed pueda contener la mayor inflación en décadas sin enfriar la economía hasta la contracción.

Datos publicados el viernes mostraron un gasto de los consumidores mejor de lo esperado y parecieron confirmar que la inflación, que ha mermado las previsiones de beneficios de las empresas y ha pesado en el ánimo de los inversores, ha tocado techo. /Ap- Reuters

Fuente: Infobae